Principales razones del suspenso

Principales razones del suspenso

El sistema educativo español sigue unas directrices en las que las notas toman un enorme valor. Tanto es así, que nuestros estudios universitarios e incluso nuestro futuro profesional pueden depender de ello. El suspenso pasa a ser por tanto una preocupación enorme. Vamos a estudiar en la entrada de hoy las principales razones del suspenso.

El suspenso no significa lo mismo en cada tipo de estudiante. También hay alumnos que lo encajan de manera muy diferente. Vamos a revisar también aspectos que pueden afectar a nuestras notas, y sobre las que no tenemos tanto control.

 

Factores que podemos controlar

Las principales razones del suspenso las podemos diferenciar en dos grandes bloques.  Aquellos aspectos sobre los que podemos actuar, para cambiarlos y mejorarlos, y otros que hacen más referencia al contexto del alumno.

En esta sección, revisamos los aspectos que afectan a nuestras notas negativamente, y que podemos mejorar:

  • Falta de rutina: la gran mayoría de los alumnos que no obtienen buenas calificaciones llegan a esa situación por no estudiar con regularidad. Estudian el día antes, o practican un tiempo claramente insuficiente. Un estudio supervisado, o el establecimiento de horarios mejorarán drásticamente este tipo de problemas. Muchas veces, no siempre podemos vigilar el estudio de nuestros hijos. Si necesitas un profesor que se asegure de que tu hij@ estudia, puedes encontrar uno aquí.
  • Escasez de material: en otros casos, los alumnos que ya tienen ese horario de estudio no saben lo que necesitan estudiar, o si lo tienen, no estudian las partes relevantes. Ayuda mucho tener un buen libro para estudiar, o apuntes y ejercicios que remarquen la parte esencial del temario. Hemos preparado varios cursos con el fin de aliviar este problema. Puedes acceder a los cursos en este enlace.
  • No comprender el temario: en especial, en las asignaturas de números, ayuda enormemente entender bien el contenido de lo que se está trabajando. Por la razón que sea, muchos alumnos convierten estas asignaturas en actividades de repetición de procesos que no comprenden. Esto les lleva a tener que estudiar mucho más, y de una forma muy poco productiva. Es importantísimo comprender las bases y entender por qué hacemos las cosas. Busca un buen libro, o un profesor que te explique la asignatura como Dios manda. Si necesitas profesores de calidad, te podemos encontrar uno aquí
  • No aprovechar bien las clases: por desgracia, muchos estudiantes van a clase dormidos, o simplemente por obligación. Cambiar esta actitud dará resultados muy rápido. Ya que vamos a pasar en clase gran parte de nuestro tiempo, aprovechemos esas sesiones para no tener que estudiar tanto en casa. Todo lo que entendamos en el aula, va a ser trabajo que ya tendremos hecho. Cada vez que asistamos al instituto, tratemos de sacar el máximo provecho a esas clases.
  • Falta de un lugar de estudio: similar al factor de la rutina. Debemos acostumbrarnos a tener un sitio de trabajo, como ya hemos comentado en otras entradas. Asociar un lugar a una actitud es importante. Que nuestro lugar de trabajo sea también el lugar en el que nos relajamos, hará que nuestra mente se disperse y mezcle aspectos. Dediquemos un lugar a cada cosa, y sabremos que cuando estemos en nuestro sitio de estudio, aprovecharemos ese rato al 100%.
  • Desmotivación: otro aspecto muy frecuente. Por desgracia, el sistema educativo no le da mucha importancia, y el currículo de las asignaturas muchas veces no es un aliciente para el estudio. Sin embargo, enfocar el estudio al futuro, mostrando el final del trayecto, puede ayudar a muchos alumnos a entender que eso que les cuesta es un paso más para llegar a donde quieren.

Factores que no dependen del alumno

Como dijimos antes, las principales razones del suspenso se pueden categorizar en dos grandes grupos. Existen varios aspectos que no dependen tanto del alumno, y aún así pueden afectar muy negativamente a sus calificaciones.

Es importante diferenciar que, a diferencia de los aspectos anteriores, en estos el alumno no tiene toda la culpa. Nuestra postura en este caso debe ser de apoyo al estudiante, para ayudarle a lidiar con estos problemas que le acompañan. Al no depender de él, van a tener una solución mucho más complicada, y seguramente va a ser más fácil convivir con los problemas que solucionarlos.

Algunos factores de este estilo pueden ser:

  • Dificultades de aprendizaje: por supuesto, el TDAH, la dislexia, retraso del desarrollo… son casos que existen y que van a suponer un problema grande para los alumnos. Estos estudiantes van a necesitar más ayuda de lo normal, pero ante todo, necesitan nuestro apoyo.
  • Maestros impresentables: por desgracia, esto ocurre. Hay una gran cantidad de profesores que no están muy interesados en sus alumnos ni en que comprendan la asignatura. Mucho menos en ayudarnos si necesitamos una mano. Con estos casos, muchas veces queda apretar más fuerte en los estudios y no darle tanta relevancia a las notas.
  •  Problemas en casa: si el lugar de estudio no es un lugar propicio para el estudio, es lógico que esto va a afectar también al ámbito escolar. Puede ayudar la asistencia a bibliotecas, aunque un ambiente familiar estable siempre es lo mejor.
  • Virtudes y defectos: debemos entender también la capacidad que tiene cada alumno, así como sus puntos fuertes y débiles. Los estudios están centrados en una serie de habilidades relacionadas con la memoria y los números. Muchos jóvenes no destacan en esas áreas, ni lo necesitan para lo que les interesa. Son alumnos en los que el 10 no necesariamente debe ser nuestro objetivo, aunque no ha de confundirse con la capacidad. Con trabajo y estudio, todos podemos mejorar nuestras calificaciones.

Actitud frente al suspenso

Después de haber revisado las principales razones del suspenso, tendremos un abanico importante de posibilidades que pueden estar afectando a nuestras calificaciones.

El modo de funcionar variará según la tipología de esas causas. Al haber diferenciado los factores en dos grandes grupos, vemos que las primeras tienen su motivo principal en algún tipo de irresponsabilidad por parte del alumno. 

Si el motivo de nuestras malas notas se encuentra en el primer bloque, debemos poner nuestro centro de atención en el estudiante. Busquemos cual es la causa, y propongamos al alumno métodos y sistemas para lidiar con ello. Estos problemas tendrá que arreglarlos él, aunque podamos ofrecerle ayuda. 

Por el contrario, si los problemas que ocasionan las malas notas pertenecen al segundo bloque, nuestra actitud debe ser más de apoyo. Estos aspectos poco o nada tienen que ver con lo que el estudiante pueda hacer para mejorar, por lo que debemos estar a su lado para que pase esa fase. Que no pierda las ganas y mantenga el esfuerzo es fundamental, ya que una vez aprobada la asignatura, el problema desaparecerá. En el caso de las dificultades de aprendizaje es más complejo, pero la actitud de apoyo al alumno sigue siendo esencial.

Si no sabes cómo lidiar con estos factores, puedes contactar con nosotros para encontrar un profesor especializado. Además de ayudarte con las asignaturas, te enseñarán a lidiar con estas dificultades que te encontrarás a lo largo de tu carrera escolar. 

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